He estado en todas partes y en ningún
lugar. El miedo ya no existe en mi. He percibido a mi mente
expandiéndose en lugares en los que no sabía que se podía estar.
Hoy he sonreído a la muerte y la invite a jugar. En realidad todos
danzamos constantemente con ella, solo que yo soy consciente. Eso es
lo único que ha cambiado realmente. Lo acepto, lo asumo y me libero
del miedo, entendiéndolo como natural y me comporto con naturalidad
sobre ello. Pero la posibilidad de lucha, da la idea de victoria si,
yo hoy siento cerca la gloria, pues saldré victorioso de este asalto
y pasar por esto, enderá en mi alma una idea constructiva del yo
mismo. Quizás mi cuerpo haya enfermado, pero mi vivencia ha de sanar
mi mente, lo está consiguiendo sin duda, ahora solo necesito, mi
aquelarre de extirpación quirurjica. Un proceso de recuperación en
casa y rehabilitación en el que gozaré de los trainisg de los que me
he provisto (quien sabe, quizás mi incapacidad para aprender ingles
siempre se debió a un benigdoma en esa zona, nunca se sabe xD) así que
voy a intentar ser mejor desde el principio. Mi espíritu de
autosuperación frente a lo que me puede ofrecer esta vida, es mas
alto que nunca. Yo rompo con las barreras del infinito y no me
detengo. No necesito moverme, no salgo de mi habitación y nadie me
puede negar que me muevo en todas partes. Esta es la única forma que
tengo de explicar las sensaciones que perciben mi piel. Es una
inspiración que me nutre. Un regalo ara el alma que satisface. No
tengo miedo a morir. Pero tras mirar a la muerte, tengo muy claro por
lo que vivir y ahora que se que mi muerte no es inevitable. Vivo cada
segundo mejor que nunca.
En cada mirada, solo veo lo
verdaderamente importante. Os quiero.
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